1 de Septiembre de 2025
En un centro de datos, la energía es tan vital como el aire acondicionado o la conectividad.
Sin embargo, detrás de servidores, UPS y generadores de respaldo, existe un sistema silencioso que protege a todo el ecosistema: los sistemas de tierras físicas y pararrayos.
Sin ellos, incluso la infraestructura más avanzada puede quedar vulnerable a fallas eléctricas, descargas atmosféricas y riesgos de seguridad.
Este documento busca profundizar en la relevancia de estos sistemas para centros de datos modernos, explorando su diseño, normatividad, aplicaciones prácticas, tendencias tecnológicas y consecuencias de no implementarlos correctamente.
El nombre técnico es “Sistema de Puesta a Tierra”, mientras que de forma coloquial se le conoce como “Sistema de Tierras Físicas”
Un sistema de tierras físicas es un conjunto de conductores eléctricos que conectan la infraestructura a tierra.
Su función es desviar corrientes de falla, transitorias o atmosféricas hacia el suelo de forma segura, protegiendo tanto a las personas como a los equipos.
En un Data Center, donde conviven sistemas de TI, telecomunicaciones y energía, el sistema de tierras se convierte en el eje central para garantizar:
- Potencial eléctrico uniforme entre racks, tableros y equipos.
- Estabilidad en la operación de servidores y dispositivos de red.
- Protección de datos contra pérdidas por descargas eléctricas.
- Seguridad humana al reducir riesgo de choques eléctricos.
La efectividad de un sistema de tierras se mide en resistencia de puesta a tierra.
Cuanto menor es la resistencia, mayor es la capacidad de disipar energía eléctrica.
Valores de referencia:
- Instalaciones generales: ≤ 5 ohms.
- Centros de Datos y hospitales: ≤ 1 ohm.
El diseño debe considerar:
- Resistividad del suelo mediante estudios (Wenner, Schlumberger).
- Tipo de electrodos: varillas de cobre, mallas, placas o sistemas químicos.
- Configuración geométrica para reducir caídas de potencial.
- Conexiones permanentes (soldadura exotérmica).
Un sistema de puesta a tierra para equipos electrónicos.
Proporciona una referencia estable que minimiza ruidos e interferencias. Con ello aumenta la confiabilidad de servidores, PLC’s y sistemas de control en ambientes críticos. Este sistema complementa al sistema de electrodos de puesta a tierra al garantizar calidad de energía y continuidad operativa. Así se protege la integridad de la información y se prolonga la vida útil de los equipos.
Los centros de datos deben cumplir con normativas nacionales e internacionales que regulan sistemas de tierras y pararrayos:
- ANSI/TIA-607-C: telecomunicaciones y puesta a tierra.
- IEEE Std 142 (Green Book): guías de sistemas de puesta a tierra.
- IEEE Std 1100 (Emerald Book): protección de equipos sensibles de TI.
- NFPA 780: instalación de pararrayos.
- NFPA 70 (NEC) y NOM-001-SEDE: códigos eléctricos aplicables.
- Uptime Institute Tier Standards: recomiendan redundancia y confiabilidad en protección eléctrica.
Un rayo puede alcanzar hasta 200 kA y más de 100 millones de voltios.
En un centro de datos, un impacto directo puede interrumpir operaciones globales y ocasionar pérdidas irreversibles de datos.
El sistema de protección contra descargas atmosféricas (SPDA) consta de:
1. Captación: puntas Franklin, mallas o jaulas de Faraday.
2. Conducción: bajantes que dirigen la corriente.
3. Disipación: integración con el sistema de tierras físicas.
La ausencia o deficiencia en sistemas de tierras y pararrayos genera:
- Choques eléctricos en personal.
- Pérdida de información crítica.
- Daños en servidores y equipos de red.
- Incendios por corrientes de fuga.
- Interrupción operativa con pérdidas millonarias.
Un sistema de tierras físicas y pararrayos bien diseñado proporciona:
Estabilidad, confiabilidad y seguridad en el sistema.
- Seguridad de datos y cumplimiento con SLA.
- Protección de activos de alto valor.
- Reducción de interferencias electromagnéticas.
- Cumplimiento normativo y mitigación de sanciones.
Aspecto |
Con tierras y pararrayos |
Sin tierras y pararrayos |
Continuidad operativa |
99.999% asegurada |
Paros frecuentes por fallas |
Seguridad de personal |
Protección contra choques |
Riesgo alto de accidentes |
Protección de datos |
Integridad garantizada |
Pérdida de información |
Equipos de TI |
Mayor vida útil |
Daños por transitorios |
Cumplimiento normativo |
Conforme a estándares |
Exposición a sanciones |
En centros de datos, el mantenimiento debe incluir:
- Mediciones anuales de resistencia de tierra.
- Inspección física de conexiones.
- Pruebas de continuidad en bajantes de pararrayos.
- Sistemas de monitoreo en línea que reportan valores en tiempo real.
- Un centro de datos en Latinoamérica sufrió la caída de servidores por un impacto de rayo debido a una malla de tierra mal conectada (>20 ohms).
- En un hospital europeo, equipos médicos fallaban por diferencias de potencial hasta que se rediseñó la puesta a tierra a 0.5 ohms.
- Una planta industrial perdió un transformador por falta de mantenimiento en tierras, con costos de millones.
En el ecosistema digital actual, los centros de datos no pueden permitirse vulnerabilidades.
Los sistemas de tierras físicas y pararrayos son la primera línea de defensa para garantizar seguridad, continuidad y confiabilidad.
Más allá de un requisito normativo, representan una inversión estratégica que asegura el presente y futuro de las operaciones digitales.
3 Beneficios clave de una implementación precisa
Continuidad operativa 24/7
de principio a fin
Evitas interrupciones en servicios críticos que podrían impactar tu negocio o reputación.
Escalabilidad y crecimiento sin rediseños
Un centro de datos bien ejecutado puede expandirse de forma ordenada y rentable.
Cumplimiento normativo y auditorías exitosas
Reducirás riesgos legales, técnicos y financieros al alinearte con normas internacionales.